Poemas de invierno


El reloj camina cansado y rendido
y la fría tarde atrapa a un tímido corazón
hasta sumergirlo entre sus colores y sonidos...

Sé que podría elevarme al infinito
y hacer de un segundo algo eterno,
con tan solo la caricia de tus manos.

Y sé que cuando llegan los vientos frios
es cuando escucho tu nombre junto al mio,
bajando las montañas como si fueran un río...

Y que cuando mis poemas vuelen hasta tu cielo
allá me mostrarás lo que mis lágrimas no han visto,
y que encontraré el remedio para un corazón marchito.

Que no podría volver a ser un ave de paso,
o una hoja seca vagando por el otoño..
Que simplemente no podría olvidar cuanto te he amado...

Sé que mi existencia tiene sus raices en tu mundo
y en la tierra de nuestros años...
como una semilla que cae para nacer al lado del camino...

Los horas en mi reloj se han marchado
y no me han dejado más que a tu recuerdo
en forma de tinta, papel y poemas de invierno...




Andrés Guzmán (jueves 27, octubre 2011)

No perderte nunca


Jamás dejes de escribir...

Déjame huellas tuyas para cuando te vayas,
no olvides que para entonces me harás mucha falta...

Espero que aún nos podamos tener por muchos años,
sin embargo el adios nos llegará tarde o temprano...

Así que dejame ver tu corazón humano
más allá de nuestra condición y nuestro lazo.

Plasma tu huella entre prosa o poemas...
dame por herencia tus palabras de amor o quebranto.

Y no importa lo que escribas
yo lo guardaré para cuando hayas marchado.

Y estarás conmigo para cuando no pueda decirte que te amo...
y para aquellos días en que buscaré tu voz en medio del llanto.



Andrés Guzman (octubre 19, 2011)

Cada verso cantado


Las cuerdas en mi alma
vibran al toque de tu ternura...
mujer hermosa que respiro a cada momento.

Tu amor daba vida a mi guitarra,
y ella pronto se perdió en tus mañanas...
complice fuiste de todos mis secretos.

Tu nombre y el mio en cada nota
y nuestras miradas en la melodía absoluta.
Se unieron entre cobijas nuestros cuerpos.

Nuestro canto derribaría murallas
pero es sútil como los colores de la luna...
Cada verso cantado será una chispa sobre el fuego.

Eleva pues tu canto por entre las montañas
y di mi nombre a cada ave del cielo...
Divulgame entre nubes viajeras y el viento...

Arrebata mi nombre de los labios de la angustia
y canta de nuestro amor por cada rincon del pueblo.



Andrés Guzmán (martes 18, octubre 2011)

Nuestro angel


Derrama de tu esencia mujer
sobre lo aspero y masculino
de mis sentidos y mi piel...

Déjame oir como escapan tus gemidos
mientras brotan los humedales
de tus pasiones sabor a miel.

Amarra este libido descomedido
a tus caderas y a tus senos...
pues no sabré dejarte ni serte infiel.

Y escribiré nuestra historia,
tanto el mañana como el ayer...
sobre nuestro amor, tallándolo con un cincel.

Y así vendrán las mañanas cargadas de suspiros
entre cuerpos amarrados y ya sin frio...
por nuestro angel y el amanecer.



Andrés Guzmán (domingo 16, octubre 2011)

Inevitable


Se que el mañana llegará...
y que aunque mi vida se agote en la noche,
que el nuevo día será inevitable.

Se que el polvo de esta tierra nunca se acabará...
que mis huesos terminarán siendo barridos por las calles
o quizás con el viento se dispersen por valles y rincones.

Sé que nunca podré vencer a los bastos mares..
que siempre me cautivaré al ver las hojas cayendo...
que jamás podré callar mis versos al llegar el invierno.

Y que estas cosas son inevitables...
como inevitable es que caiga rendido a tus pies
sin poder hacer nada más que amarte...

Se que no puedo huir de la noche
como tampoco puedo parar de adorarte...
que para mi no hay escape, mi corazón te pide a cada instante.

Y que no puedo callar a los vientos del camino...
como no puedo callar las voces de mi mente
las del corazón y del alma que pasan llamándote.

Que no puedo tapar al sol de alumbrar a este mundo
como no puedo tapar tu luz de alumbrar el mio...
más aún cuando ha pasado en sombras y tenues paisajes.

Amor mio, eres inevitable...
sé que estoy destinado a amarte,
estemos cerca en la vida... o lejanos y distantes.

Veré los años pasar
y a mi vida agotarse...
y aún así no podré evitarte.



Andrés Guzmán Carvajal (jueves 13, octubre 2011)